Autoría: Beatriz Garcia


28 de mayo de 2024

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Se conoce como tono muscular al estado permanente de contracción parcial, pasiva y continua de los músculos”. Se trata del estado de reposo de los músculos que ayuda a mantener la postura corporal acorde para cada movimiento. (Definición de Julián Pérez Porto y Ana Gardey, 2012).

El movimiento surge del cerebro, desde el cual se envía la orden a los músculos a través de la médula espinal y los nervios periféricos.

El tono muscular incide directamente en las actividades que nuestros pequeños realizan cada día: guarda una estrecha relación con la postura y el movimiento, y también con los niveles de atención y los estados emocionales. Así pues, el tono muscular está directamente relacionado con los procesos de aprendizaje, por lo que un bajo tono (hipotonía) o un alto tono (hipertonía) puede interferir en estos. 

Es importante que desde que son bebés estimulemos su tono muscular con actividades como mecerles, acariciar y masajear todas sus extremidades de diferentes maneras, como por ejemplo con una pelota de masaje, realizar elevaciones y estiramientos del tronco muscular…

A continuación detallamos una serie de juegos y actividades que ayudarán a vuestros hijos a ejercitar el tono muscular. Los clasificaremos en actividades de motricidad gruesa y actividades de motricidad fina.

ACTIVIDADES DE MOTRICIDAD GRUESA:

  • El gateo desarrolla fuerza en las manos y estabilidad en hombros, aporta propiocepción en muñecas, codos, caderas, hombros y rodillas.
  • Suspensión en una barra: fortalece brazos y tronco.
  • Hacer el puente: Desarrolla la estabilidad de los hombros, brazos y manos.
  • Arrastrarse como soldados o como indios.
  • Girar sobre sí mismo.
  • Hacer la carretilla nos ayuda a fortalecer los brazos hombros y manos.
  • Saltar nos ayuda a fortalecer el tronco y las piernas: podemos animarles a saltar a la pata coja, con los pies juntos, saltar desde un bordillo, de un aro a otro.

ACTIVIDADES DE MOTRICIDAD FINA: 

  • Rasgar papeles de diferentes texturas y grosor (papel seda, de periódico, celofán…) estimula y fortalece el movimiento de las manos.
  • Abrir y cerrar pinzas de la ropa ayuda a trabajar los músculos de las manos.
  • Abrir y cerrar cremalleras.
  • Exprimir limones y naranjas con un exprimidor es un excelente ejercicio para desarrollar el control y la fuerza manual.

Una buena estimulación del tono muscular de nuestros hijos desde bien pequeños nos ayudará a prevenir dificultades de aprendizaje más adelante. Y recuerda, ante cualquier duda, siempre es aconsejable consultar a un especialista.

Autora: Beatriz García (Colegio María Teresa)